R. 10: Canto yo y la montaña baila.
¿Y si el mundo estuviera lleno de voces que no escuchamos?
Si hay algo que me gusta hacer en este espacio es recomendar libros que sean, quizás, algo más fuera de lo común. Libros que me tocaron, que llamaron mi atención por algo o a los que simplemente llegué por magia, por obra del destino. Canto yo y la montaña baila, de Irene Solà, pertenece a estos últimos.
Recuerdo haberlo visto en las estanterías de aquella librería en un shopping al que siempre voy a pasear los fines de semana con mi familia. Estaba ahí, inmóvil, pero presente, invitándome a abrirlo y nutrirme de él. No sabía bien con qué iba a encontrarme, pero a veces cuando esto sucede la sorpresa termina siendo más satisfactoria.
Me adentré en él como si fuera un bosque espeso al que uno entra sin saber bien qué lo llama, y sale con ramas en el pelo, barro en los piel y algo nuevo latiendo dentro. Este libro es exactamente eso: un bosque. Un monte catalán donde hablan los ciervos, las tormentas, los hongos y las mujeres.
Después de recitar un poema siempre espero un momento. Después del eco de las palabras, después de que mi voz roce las cosas y llene todo el espacio entre los objetos, guardo silencio. Para separar el poema de lo demás. Y escucho.
Y ojo, no esperes encontrarte con una novela tradicional, porque es mas bien un canto, un hermoso canto polifónico en el que cada capítulo adopta una voz distinta para contar su propia historia. A veces humana, a veces animal, a veces un espectro o una nube. Lo que une estas voces es el territorio compartido: los Pirineos, la memoria rural, la pérdida, la guerra, el amor, la tierra, la vida y la muerte. Un territorio vivo.
Solà rompe con la linealidad y la estructura clásica, pero no por capricho, sino como un acto de escucha. Nos obliga a afinar el oído, a prestar atención a lo que suele silenciarse: el dolor de los que vinieron antes, el eco de lo que aún no ha nacido, los susurros del paisaje, la historia que cuenta la tierra que habitamos. Es un libro profundamente político, feminista sin consignas y ecológico sin eslóganes. Es una oda al presente, a la realidad que habitamos, a qué hacemos con ella.
¿Saben qué me pasó cuando leí este libro? Me sentí pequeña. Pero no pequeña como si no importara, al contrario, entendí que todos formamos parte de algo más grande. Todos somos parte de ese todo. Porque eso intenta la autora, hacer que nos demos cuenta que lo que nos rodea también nos forma, para bien o para mal. Nos moldea, forma parte de nuestra historia. El pasto en el que plantabas tus pies para jugar de chiquito, el árbol al que te gustaba treparte para ver todo desde arriba, el amor por los animales, el amor por un hermano.
La prosa es delicada, luminosa y por momentos brutal. Hay imágenes que desarman y otras que dejan sin aliento. Leerlo es como mirar un cuadro impresionista de cerca, cada trazo parece caótico, pero cuando te alejás, la figura aparece, vibrante y entera. Todo tiene sentido.
¿Quién canta cuando canta la montaña? Tal vez todos, tal vez nadie. Tal vez esa es la pregunta que nos deja la autora: si somos capaces de escuchar otras voces, otras formas de estar en el mundo. Porque nosotros estamos vivos, pero lo que nos rodea también.
Es un libro para leer con los ojos abiertos y el corazón disponible. Un canto que, si te dejás llevar, también hace bailar algo adentro tuyo.
Si tuviera que definir este libro en…
Una canción: Hasta la raíz de Natalia Lafourcade.
Un sentimiento: reverencia ante la vida.
Un color: verde musgo.
Un aroma: a pasto mojado por la lluvia.
Un lugar: una montaña.
Un objeto: una piedra encontrada en medio del bosque.
Ideal para leer cuando: te sentís desconectado de lo que te rodea.
¿Lo volvería a leer?: Un millón de veces.
Lo recomendaría a alguien que: ama la naturaleza.
Feliz lectura, Reni.
Y vos, contame, ¿ya conocías este libro? ¿lo leíste? ¿estaba en tus pendientes?, si respondiste que no a todo ¿te dieron ganas de leerlo con esta reseña?
Te leo en comentarios! 📚
Otro más para la lista de pendientes!
Tus palabras son mágicas, Reni, gracias por esta reseña tan hermosa. 🤍
tenía este libro pendiente desde hace mucho. me llamaba la atención y a la vez quería dejarlo para más adelante. gracias a tus palabras me han entrado unas ganas tremendas de abrirlo. espero conectar mucho con él como lo he hecho leyéndote 🤍